El Trillo Simbiosis de Isla Chiquita

Isla Chiquita es una pequeña isla de grandes maravillas. Rodeada por las aguas turquesa del Golfo de Nicoya de Costa Rica, este puntito de arena y bosque recuerda historias de infancia sobre tierras escondidas y tesoros secretos.  Visitarla es toda una experiencia y, como lugar de encuentro entre mar y tierra, deleita con su singular riqueza natural.

La naturaleza ejerce una magia especial. Su belleza es admirada al instante y, hoy en día, se fotografía y se comparte rápidamente con los seres queridos. Pero hay muchas capas bajo superficie y estas contienen la clave para apreciar un significado de impacto más profundo. El Trillo Simbiosis de Isla Chiquita es una atractiva experiencia de “baño en el bosque” que levanta esas capas y eleva el alma. Muestra la energía interconectada y constante entre el bosque de la isla y el océano y nos invita a participar en su danza. La experiencia se lleva a cabo a lo largo de una accesible ruta de senderismo que conduce a doce miradores. Cada uno está marcado por una estación interpretativa que inspira apreciaciones profundas de los procesos de la naturaleza y nuestra relación con los mismos.  Se sigue una secuencia bien planificada que nos guía y nos permite apreciar el entorno y los lazos que dan sentido a nuestra existencia.

Destaca la señalización cuidadosamente distribuida y la narrativa que esta construye estación por estación.  La misma inspira a identificar y encontrar detalles, pistas y elementos únicos en una búsqueda de tesoros cósmicos. ¡Felicitaciones al biólogo y experto en senderos que diseñó esta experiencia imperdible! Realmente honra la reputación que destaca a Costa Rica como un paraíso natural y como un innovador turístico.  En estos días donde la búsqueda de propósito, lazos, y significado han cobrado mayor importanica, el Trillo Simbiosis de Isla Chiquita merece ser vivido una y otra vez.